
Luego de la sorpresiva suspensión de la reunión prevista para el pasado miércoles, los trabajadores hospitalarios marcharon ayer en diferentes localidades de Río Negro, en repudio a la actitud de la gobernadora, Arabela Carreras, y en reclamo de mejoras salariales.
En este contexto, a primera hora de ayer, el director del hospital Artémides Zatti, José Luis Rovasio, presentó su renuncia.
Y más tarde, en la asamblea de hospitalarios autoconvocados, los jefes del departamento de enfermería y los diferentes servicios de atención, confirmaron sus renuncias a los cargos.
Además, se anunció una huelga de “lapiceras caídas” y la no carga de datos de los casos de coronavirus.